jueves, 21 de diciembre de 2006

URGENTE INVERSIÓN EN TURISMO


Costa Rica crece a menor ritmo que sus competidores
El turismo representa una de las principales fuentes de ingreso para nuestro país, las arcas del Estado se llenan en un 8 por ciento con los ingresos que genera esta actividad.
Anualmente más de 1, 7 millones de turistas dejan cerca de $1.589 millones, estas son cifras alentadoras en un primer momento, pero que comparadas con el resto de la región centroamericana – partiendo del hecho que Costa Rica es el principal destino turístico en el istmo- deben empezar a preocuparnos.
Según la Organización Mundial del Turismo, los ingresos por concepto de esta actividad que se generan en el país crecen a un ritmo más lento respecto a otros países del istmo y del Caribe como El Salvador, Panamá Honduras y República Dominicana.
Si bien Costa Rica se mantiene aún a la vanguardia, las autoridades nacionales deben de redoblar esfuerzos en mejorar las condiciones con las que se ofrece este servicio.
A lo mejor frente a nuestros competidores tenemos una ventaja competitiva por la diversidad de flora y fauna en el territorio nacional, y por los servicios que damos a nuestros visitantes, pero en otros ámbitos quedamos rezagados.
A nivel de infraestructura la deteriorada red vial nacional es una de las principales quejas más frecuentes de los turistas que arriban al país, esperemos que para el 2007 el Consejo de Vialidad y las municipalidades inviertan de manera eficiente el 100% de los recursos que se les destinarán.
Siempre en el ámbito de la infraestructura los dos aeropuertos internacionales del país, - Juan Santamaría y Daniel Oduber- deben ser modernizado con mejores salas de abordaje, y pistas de aterrizaje.
Otro de las debilidades en las que se debe de trabajar es en la seguridad de los turistas, día a día los extranjeros se enfrentan a las amenazas de atracos por parte de delincuentes en el país, considero muy acertado el primer paso del gobierno en este ámbito, con la creación de la policía turística, sin embargo, se debe de ampliar el número de efectivos para un mayor control.
No solo en infraestructura y seguridad se debe priorizar, es necesario ser más innovadores, se ocupa un plan que incluya programas para incentivar el turismo rural comunitario tanto como el de sol- playa y el de naturaleza-aventura. Además, el Instituto Costarricense de Turismo debe de apostar a una mejor promoción de nuestros atractivos naturales en el extranjero.
Estas sugerencias van de la mano por supuesto, con otorgarle una mayor seguridad jurídica a los inversionistas del sector turístico de nuestro país, así como erradicar los trámites engorros para los mismos.




lunes, 18 de diciembre de 2006

Acuerdo de Asociación con la Unión Europea: Una responsabilidad compartida


A partir de enero entrante las autoridades de nuestro país al igual que las de los otros cinco países centroamericanos tienen una enorme responsabilidad: buscar las mejores condiciones para sus países en las rondas de negociación con miras al Acuerdo de Asociación con la Unión Europea, será una labor difícil pero promisoria.
En el caso concreto de Costa Rica el presidente Óscar Arias ha señalado que para enero del 2007, se integrará la comitiva que representará nuestros intereses en las 11 rondas que iniciarán en ese mismo mes en alguna nación centroamericana.
Nuestros voceros tendrán que regirse - durante todo el año para el que esta prevista la negociación -, bajo los principios de transparencia y participación, con el objeto de que en cada capítulo del acuerdo queden plasmados los intereses de todos los sectores del país.
Sin embargo, esa transparencia y participación no debe de confundirse con una concertación con los grupos sindicales y productivos del país que hayan mostrado en pasadas ocasiones defender solo sus intereses.
Como es bien sabido, las decisiones de la negociación recaerán en el "Consejo Intersectorial", el cual esta integrado por los cancilleres y los ministros de comercio exterior o economía de cada país, sin embargo, todos deben de buscar cómo liderar el proceso interno para, a partir de él, lograr el mejor acuerdo con sus demás colegas centroamericanos y, desde luego, con la Unión Europea.
Como señale al principio la tarea en la región será dura, pero promisoria, en la unión estará la fuerza, los europeos nos dan un claro ejemplo de ello: sus países, nunca habrían podido lograr sus metas económicas de no haber sido por esa cohesión que lograron hace más de una década.

Irresponsabilidad en el dial



Un, dos, tres, probando.
Si lo que les voy a comentar no es una irresponsabilidad, pues que alguien me diga, por favor, qué es.
Los medios de comunicación y los comunicadores tenemos una responsabilidad social con nuestro país, que va más allá de brindarle a la audiencia información veraz para que tome decisiones acertadas, o para que se forme un criterio y pueda emitir su opinión, basada en hechos y situaciones concretas.
Sin embargo, me atrevo a decir que algunas de nuestras emisoras de radio no están conscientes de esto o, por negligencia, lo pasan por alto.
Por lo que sea, es inaceptable abrir los micrófonos para que personas con algún resentimiento social llamen y expongan sus comentarios, basados en experiencias propias y emitidos con altas dosis de indecencia, vulgaridad e irrespeto.
Señores "locutores", no se justifiquen diciendo que es el radioescucha el que se expresa, porque, entre sus carcajadas y alboroto en la cabina, se deja oír en ocasiones sus comentarios, que, déjenme decirles, no son propios de un profesional consciente de la trascendencia de su labor.
Directores y dueños de medios radiofónicos, contraten gente profesional y preparada para que hagan la locución. El señor que se ríe más fuerte, la señora que más grita, o el que más chistes se sabe, no son los más idóneos para sus programas.
En Costa Rica hay gente simpática y ecuánime que, ante el micrófono, puede hacer reír a la audiencia, no necesariamente con burlas hacia las autoridades nacionales, nicaragüenses, homosexuales, sacerdotes y personas discapacitadas, y, lo más importante, con una formación académica que los haga merecedores de tener el privilegio de informar, orientar y escuchar a los costarricenses.

Sin tiempo para investigar



Los ticos tenemos poco acceso a las bibliotecas públicas, que son baluarte de la educación

El acceso a la educación es un concepto que debe entenderse en el país no solo como la enseñanza gratuita y obligatoria, o por las facilidades que da el Estado a los estudiantes -como servicios de comedor, transporte y bonos escolares-, sino también como la posibilidad para los estudiantes de acceder a los materiales de las bibliotecas públicas.
Por desgracia, nuestras autoridades no están conscientes de esto pues, si lo estuviesen, no escatimarían el dinero que las 58 bibliotecas nacionales necesitan para prestar servicio adecuado, acorde con las necesidades de los estudiantes.
Resulta inconcebible que la Biblioteca Nacional tuviese que reducir el tiempo de atención al público tras su primera reapertura en 1992, después de la remodelación del edificio por los daños que sufrió en el terremoto de Limón en 1991. Antes permanecía abierta de lunes a sábado de 8:30 a. m. a 8:30 p. m.; ahora, de lunes a viernes de 8 a. m. a 4 p. m.
Válida comparación. ¿Qué posibilidades tiene un estudiante universitario que labora una jornada de 8 horas, de acceder al material de la biblioteca, o los estudiantes de zonas rurales que requieren algún documento de este recinto josefino y quienes emplean mucho tiempo en desplazarse hasta la capital? Detesto las comparaciones, pero, en otros países de Latinoamérica, como Argentina, las autoridades -a sabiendas de lo imprescindible que es el material bibliotecario- abren las bibliotecas de lunes a domingo hasta la medianoche.
El embrollo no es solo de tiempo: también es de personal. En la Nacional, por ejemplo, 5 funcionarios atienden a los casi 1.000 usuarios que llegan por día, y en las sedes regionales y municipales hay uno solo para realizar todas las labores, desde atender al público hasta hacer el aseo.
Esto me pone a pensar si la inversión en el área educativa en el país realmente es prioridad, como proclama el Poder Ejecutivo.
Esta privación de la información, la metodología ambigua y los programas inútiles, la demanda laboral de hoy y la globalización me ponen a reflexionar en qué clase de educación están recibiendo y recibirán los médicos, abogados y educadores en quienes se ampararán nuestros hijos y nietos.